Esa tarde en el Valhalla, ahora quien hacia la guardia era Valkyria Isarose. Nuevamente el viento soplo y deposito sobre las palmas de sus manos más pétalos de rosa, que le trajeron las palabras de Anthony:
“Si hubiera sabido que estabas con los Leegan te hubiera mandado una invitación”
La Valkyria fue hasta el telescopio y miro ansiosa hacia la Tierra… Ahí estaba el, vestido de gala, portando un magnifico kilt que lo hacia verse como uno de los Dioses del Valhalla.
--¡Oh, ahí esta! ¡Luce tan deslumbrante!—pensó en voz alta Valkyria Isarose y su corazón se acelero--
Lanzó un suspiro y de inmediato toco la campanilla de cristal. Al instante llego Valkyria Ale para enterarse de las novedades.
--¿Qué pasa? –dijo Alejandra intrigada al ver a Isarose tan sonriente.
--Entérate por ti misma, mira—contesto ella con los ojos brillantes y cediéndole el telescopio.
--¡Ahh!—suspiro Alejandra-- hoy se ve tan…
--Deslumbrante—completaron ambas al unísono sonriendo ampliamente.
En ese momento mas pétalos de rosa llegaron hasta ellas y tomándolos entre sus bellas manos pudieron escuchar lo siguiente mientras observaban sin perder detalle.
“Entonces estás mucho más invitada que los demás, tienes tres invitaciones”
--Que amable es Anthony con todos—
--Si, pero esta vez no solo es amabilidad—aclaró Isarose señalando a la pecosa frente al chico.
--Oh, otra vez ella—exclamó Alejandra un poco molesta al darse cuenta quien era la chica.
--Sabes que así tiene que ser—sentencio Isarose.
--Si, pero siento como si una espina se clavara en mi corazón cuando los veo juntos—expreso Alejandra con un dejo de tristeza.
--Si, yo también—dijo Isarose, desviando la mirada a las nubes.
--¿Te fijaste cuán inteligente y generoso es Anthony? Quiso que la chica se sintiera bien, pero a la vez sin hacer quedar mal a sus primos y también logro quedar bien el—
La sonrisa regreso al rostro de las Valkyrias que contemplaban al chico con admiración.
--Si nuestro bienamado ha madurado rápidamente—
--Ah, que afortunada es esa chica—
--Si, mucho—
Comentaban al verlo bailar con la chica pecosa…Las Valkyrias besaron los pétalos que tenían entre sus manos y los devolvieron al viento que soplo de regreso a la Tierra y en el gran salón de la mansión de Lakewood, mientras bailaban, Candy y Anthony percibieron un olor intenso a rosas.
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